AMERICAN GANGSTER

Sinopsis: Auténtica historia de éxito de un héroe callejero del Harlem de los años 70. Nadie se fijaba en Frank Lucas (Denzel Washington), el silencioso chófer de uno de los jefes mafiosos negros del centro de la ciudad. Pero cuando el jefe muere inesperadamente, Frank decide aprovechar la puerta que ha quedado abierta en la estructura de poder para construir su propio imperio. se hace con el control del tráfico de drogas en el corazón de la ciudad, inundando las calles con un producto de mayor calidad a mejor precio.
Richie Roberts (Russell Crowe) es un policía honesto hasta la médula, pero tambien es un mujeriego. Su vida es un desastre, y no está bien visto por sus compañeros de trabajo aunque el tiene la satisfacción de estar haciendo lo correcto.

El cine de gangsters es sin duda uno de los géneros esenciales del cine estadounidense contemporáneo, y ha dado lugar a clásicos de la talla de la trilogía de El Padrino, Érase una vez en América, Uno de los nuestros o El precio del poder.
American gangster no emociona. Puede asombrar a ratos, degustarse de manera fragmentada en escenas más o menos bien resueltas y vistosas, pero no ofrecer ni la intensidad dramática ni la coherencia interna de la que sí están tocadas otras obras del género.

Lucas es el eje fundamental sobre el que se asienta el film, y es un hombre que simboliza la evolución racial en Estados Unidos durante una época convulsa com fueron los años 70, y la guerra del Vietnam que casi monopolizó la situación política y social del país.
La América que presenta el filme es un país desencantado, sumido en la guerra, asolado por la corrupción policial y con unas elevadísimas tasas de adicción porque es precisamente este descalabro el que permite a Frank Lucas construir su imperio.
En definitiva, American gangster es una revisión del viejo mito del sueño americano y aporta una valiosa reflexión acerca de su vigencia, de su poder devastador y de sus paradojas.